En el proyecto para el Parque de las Ciencias en Granada, en su emplazamiento junto al río Genil y en la ciudad inconexa, la propuesta plantea la construcción de una única cubierta que, con leves inflexiones y con una envolvente que se asemeja a la mano abierta, permite alojar las diferentes piezas del programa entre sus dedos, manteniendo de esta forma la continuidad espacial.
El espacio vacío que comunica las grandes cajas que contendrán los diversos programas -macroscopio, biodomo, tecnoforo, pabellón de Al-Andalus, auditorios y espacios para exposiciones temporales y permanentes-, estructura las comunicaciones, la logística y la relación interior-exterior con el conjunto de actividades del parque.
La estructura espacial que se propone permite una total flexibilidad de uso para configurar situaciones que entrelazan recorridos y temáticas. Un plano continuo plegado flota a diez metros de altura cubriendo los grandes espacios de exposición y subrayándolos con la luz que penetra entre sus pliegues.
En su abstracción, la gran cubierta ofrece un perfil que recuerda el skyline de la sierra de Granada. La resolución de la gran cubierta topográfica, unas 3 ha (30.000 m2) de superficie, se va adaptando a las necesidades volumétricas, que generan en su interior espacios cerrados de gran dimensión y altura que albergarán los diferentes programas.