Notas previas a un pase de diapositivas para los alumnos de la ETSAB. Barcelona (18-12-2004)
Al exterior y sin ningún tipo de protección solo podemos sobrevivir unas pocas horas. A lo largo de la historia hemos imaginado y construido muchos artilugios para defendernos de una naturaleza indiferente a nosotros y muchas veces hostil. Las buenas arquitecturas siempre se han planteado como objetivo prioritario defendernos del viento, de la lluvia, de los ladrones, del calor, del deslumbramiento, del ruido, de los curiosos… y hacerlo de la manera mas económica e ingeniosa posible, que evidentemente es también la mas emocionante. Las buenas arquitecturas han convertido aquel exterior inhóspito en un interior confortable, donde la vida es posible porque todas las variables estan dominadas a nuestra voluntad.
Sin embargo, muchas veces tenemos suficiente con solamente controlar algunas de ellas, o incluso una sola, dejando a las otras que hagan lo que quieran porque no molestan. Esta modificación parcial de la naturaleza cualifica el lugar donde la hemos producido y ya no podemos decir que estamos del todo fuera ni tampoco que estamos del todo dentro. Tampoco tenemos claro cuándo salimos y cuando entramos porque sus límites son imprecisos. Decimos entonces que estamos en un espacio intermedio.
A lo largo de la charla proyectaremos una serie de imágenes para ilustrar lo que comentamos. Imágenes de gestos, vestidos, objetos, hitos, planos verticales, planos horizontales, envolventes… y también imágenes de arquitecturas y de espacios urbanos que se han propuesto, desde sus planteamientos más iniciales, la creación de espacios intermedios como objetivo prioritario. Unos espacios económicos, ambiguos y versátiles que proporcionan unas secuencias ricas y complejas en el traspaso entre interior y exterior, y que facilitan que el edificio se prolongue en el entorno y que el entorno penetre suavementte en le edificio.
Todo lo contrario del planteamiento simple de la arquitectura totémica, ensimismada y aislada, que siempre alardea de su radical discontinuidad con relación al lugar donde aparece.