Por Anna & Eugeni Bach. Viaje de Saarlouis a Saarbrücken, 26 km, aprox. 25 min. Dirección: Schloßstraße, Saarbrücken, Germany.
El palacio de Saarbrücken conserva el nombre de “castillo” debido a que está emplazado en el mismo lugar donde ya desde el siglo X había existido una fortaleza, aunque el actual edificio no tiene ningún tipo de función defensiva. En el siglo XVIII, el conde de Nassau encarga al arquitecto Friederich Joachim Stengel que erija un nuevo palacio, de estilo barroco, al que le sucederán una serie de intervenciones y modificaciones que abarcan hasta los años 40 del siglo XX.
La segunda guerra mundial hizo estragos en el palacio, quedando el pabellón central en tan mal estado que, a principios de los años 80, el Ayuntamiento de Saarbrücken decidió encargar a Gottfried Böhm su reconstrucción.
El proyecto de Böhm es posterior a los que hemos visto en las entradas anteriores, y refleja un lenguaje mucho más postmoderno que el que utilizaba en aquellos proyectos. Pero bajo esta primera apariencia, podemos ver que la estrategia utilizada es exactamente la misma. Böhm utiliza una reconstrucción que en los principales rasgos recrea lo existente, pero, en cambio, con unos materiales y un lenguaje totalmente distintos. El resultado es intrigante, dado que permite recrear en la imaginación el palacio original y, a la vez, hacerlo desde una lógica técnica contemporánea.
