Un edificio para la ciudad. Biblioteca pública en la calle Isabel la Católica de Valencia.
El proyecto tiene lugar en Valencia, en la zona del primer ensanche, un área muy consolidada de la ciudad próxima al centro histórico. La zona donde se ubica la biblioteca tiene unos límites claros: calle Colón al norte, Gran Vía Marqués del Turia al Sur, la calle de Ruzafa al Oeste y el jardín del antiguo cauce del Turia al Este. La biblioteca se ubica en la calle Isabel la Católica, vía que comunica la calle Colón con la Gran Vía Marqués del Turia.
El Ensanche de la ciudad de Valencia bebe del modelo propuesto por Cerdà. Como ocurrió en Barcelona, la realidad no respetó las premisas del plan. Los interiores de manzana, inicialmente planteados como espacio libre para los vecinos, se acabaron colmatando convirtiendo estas áreas en barrios de altísima densidad y perdiendo la vocación inicial del patio interior como espacio comunitario para los vecinos.
El solar propuesto para la biblioteca se diferencia claramente del resto de solares de la zona. La existencia de una fachada perpendicular a la calle Isabel la Católica con servidumbre de vistas e iluminación sobre el solar origina una fisura en el tejido urbano. Este rasgo fundamental origina los trazos principales de la propuesta.
El acceso al edificio se realiza a través del patio interior de manzana, garantizando así el uso del mismo. Este tránsito se acompaña de una distorsión en el volumen principal, que quiebra su fachada provocando una apertura del espacio interior y suprimiendo las tensiones que se generarían al enfrentar la fachada de la biblioteca con la fachada de las viviendas. Además el patio de manzana se refuerza con otro acceso desde la calle Cirilo Amorós multiplicando los recorridos a través del mismo y ofreciendo una salida alternativa.
El gran volumen de la biblioteca asume la responsabilidad urbana dando la fachada a la calle. En el interior se propone una edificación de baja altura (1 planta) que permite ordenar el jardín al tiempo que alberga los usos complementarios a la biblioteca: sala de usos múltiples, galería de exposiciones y cafetería, que extiende su uso al patio.
Se propone así una ciudad nueva, una ciudad interior, una ciudad dentro de la ciudad, un oasis dentro de la actividad frenética del exterior. La ciudad del ensanche invierte su carácter convexo y pasa a ser un espacio cóncavo más recogido y doméstico. Se propone el uso del patio interior como corazón de la biblioteca, como un pequeño estar urbano que da acceso al edificio y que organiza la biblioteca y lo dota de más posibilidades.
La biblioteca Isabel la Católcia trata de una recuperar el carácter comunitario que un día tuvieron los interiores de manzana con la confianza que este tipo de espacios pueden mejorar los edificio al servicio de la ciudad.
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Es un proyecto muy bueno. Vivo en la manzana de al lado y considero q al barrio le haría falta este proyecto.jeje. A disfrutar de la arquitectura!
qué proyectazo! Enhorabuena!
Enhorabuena al autor. Un trabajo realmente excelente como ejercicio de un arquitecto juicioso y sensible al lugar y a la misma arquitectura. Mis mejores deseos.
Excelente trabajo!
¡Muy buen proyecto! Enhorabuena a Javier y a los tutores.