Fuente: Estudio BaBO
Fotografía: Estudio BaBO
1. Ubicación y entorno próximo. Inserción del nuevo proyecto en el contexto.
El proyecto se encuentra en la población de Villa La Angostura, Neuquén, Argentina, dentro de la zona clasificada como bioambiental VI por la norma IRAM. El lote dónde se ubica éste, se encuentra en una calle residencial de baja densidad del barrio del Once, a unos 400 metros del boulevard principal de la Villa, tratándose de un área ya consolidada, con las infraestructuras básicas (electricidad, agua, cloaca) tendidas y en funcionamiento. La cercanía al centro permite también establecer circuitos peatonales o de transporte de bajo impacto (transporte público, bicicleta…) para su uso diario, pudiendo plantear así una minimización efectiva del uso del automóvil.
A pesar de la centralidad del emplazamiento, predominan por un lado las viviendas unifamiliares aisladas, de pequeñas dimensiones y no alineadas, y por otro, lotes sin actividad alguna, o pertenecientes a unidades de propiedad mayores, lo que confiere al área una densidad baja, real y aparente. Este factor, sumado al ripio compactado de la calle, a la ausencia de vereda y mobiliario urbano estructurador y a la gran profusión de árboles y vegetación baja arbustiva, le confieren un carácter naturalizado de alto valor ambiental, poco urbanizado.
El proyecto se ubica y se plantea en esa aparente dicotomía: por un lado la necesaria densificación del área para maximizar y optimizar el uso de las infraestructuras existentes y por otro el respeto hacia el tejido construido prexistente y el carácter paisajístico del área. El código urbano apunta también en esa dirección. Se optó en consecuencia, por consolidar la tipología más densa permitida (tres unidades de vivienda en hilera, de dos plantas cada una) pero trabajando su volumetría para que el impacto sobre el tejido prexistente fuera mínimo facilitando su integración y pertinencia visual.
En el momento de la implantación no se modificaron los niveles del terreno natural ni sus substratos, y se conservaron gran parte de los árboles existentes, caducifolios. Esta característica permite aprovechar la radiación solar en invierno y controlarla en verano. Se planteó la resolución del espacio exterior junto a un paisajista de la zona, usando especies autóctonas y alóctonas ya adaptadas, integrando la vegetación al interior de las viviendas a través de los patios y de los jardines de cada una de las unidades.
2. Proyecto.
El programa consta de cocina, lavadero, estar, comedor y toilette en planta baja y dos habitaciones y baño completo en la planta superior.
Se incorpora un patio orientado a noroeste en cada una de las tres viviendas enriqueciendo la conectividad visual entre los distintos ambientes. Se esponja así la planta baja, permitiendo ajustar las alturas para el cumplimiento del programa y de la normativa.
También se decide escalonar las tres unidades, liberando uno de los costados de los patios en todas ellas.
Con estas dos operaciones se pretende, por un lado, garantizar un mayor y más homogéneo asoleamiento de las espacios de tres viviendas y por otro, minimizar el impacto visual que tendría, en el entorno inmediato una fachada continua de esa altura y longitud. También, e indirectamente, se consiguen una mayor privacidad de las expansiones naturales de las viviendas, y la redirección de las visuales de las salas de estar al noroeste, evitando así el fondo de la vivienda del lote lindero. En cuánto a la lectura formal del conjunto, se trabajó para articular volumétricamente las tres viviendas, procurando que se entendiese cierta unidad en la operación; se aprovecharon los planos inclinados de las cubiertas como planos compartidos y vinculantes. De esta forma se produce la segunda articulación formal que define el proyecto, en el plano vertical, a nivel de volumetría.
Desde el inicio se tuvo muy en cuenta el tamaño y ubicación de las carpinterías y de las claraboyas para minimizar las pérdidas de calor en invierno, garantizando al mismo tiempo la iluminación natural en el interior para reducir el uso de luz artificial durante las horas diurnas. También se tuvo en cuenta la correcta ventilación de todos los ambientes, cruzada en los comunes, para mantenerlos frescos tratando en lo posible de reducir el uso de refrigeración forzada.
3. Sistema constructivo.
Uno de los desafíos que presentaba la construcción del proyecto era concebir el casco enteramente en madera, cerramientos, terminaciones y estructura. La elección de la madera se debió a varios factores: por ser un material biodegradable, por ser propio de la zona y por tener a nuestra disposición madera de ciprés proveniente de un desmonte en la zona. Además permitía considerar sistemas de construcción en seco.
A pesar de la profusión de este material en el sur del país, el escaso conocimiento especializado y la poca presencia de una industria de productos derivada, circunscriben su uso a la elaboración de elementos estructurales aislados y de revestimientos interiores y exteriores, presentando muchas veces patologías derivadas de su mala aplicación.
Se optó por considerar un sistema integral de armazón tomando indicaciones y la experiencia del Norges Byggforskningsinstitutt (Instituto de Investigaciones de la Construcción de Noruega) y adaptarlo a la realidad climática (mayores temperaturas, lluvias más intensas, menor acumulación de nieve), física (necesidad de cálculo sísmico estructural, distinto tipo y calidad de maderas) y humana (mano de obra no especializada, necesidad de armar un taller en obra) de Argentina.
Se usó madera de pino Oregón para los elementos estructurales (armazones). Esta es una madera de rápido crecimiento y además procede de cultivos locales de la zona del Bolsón. Para el revestimiento exterior se usó la madera de ciprés que habíamos estacionado. Las placas rigidizadoras son de OSB (generadas a partir de residuos industriales de la zona).
La eficacia del sistema, más allá de concebir el propio cerramiento como estructural, con el ahorro conceptual y material que esto implica, se basa en permitir completar una cámara de aire controlada y constante en toda la envolvente del volumen, que garantiza siempre la aireación de la madera. De esta forma se evita la pudrición y la formación de hielo (si permite la acumulación de nieve con su correspondiente aumento de la aislación de las viviendas) en las capas superiores, lo que prolonga exponencialmente la vida útil del material.
También permite tener una capa considerable y continua de aislación (75 mm de lana de vidrio), anulando todos los puentes térmicos (todas las carpinterías portan vidrio doble (DVH) y burletes acordes) asegurando así el confort interior con un considerable ahorro energético (ahorrando en el uso de sistemas de calefacción), evitando la condensación y el posterior deterioro del material. En esa dirección trabaja también la barrera de vapor, evitando que éste afecte a las capas interiores del cerramiento y los mecanismos de extracción de vapor de los locales húmedos, que evitan que la humedad deteriore la superficie de los tabiques. También la barrera de viento transpirable (tipo Tyvek) que no permite la entrada de viento, pero sí que la humedad acumulada durante la obra se evapore hacia el exterior, evita el desarrollo de esporas y semillas que producen musgos y líquenes en el exterior y mohos y colonias de bacterias en los interiores. El muro y la cubierta tienen, finalmente, una K=0,41, entre el valor A y B del área de la normativa IRAM. El color oscuro del cerramiento facilita la absorción de calor, acelerando el secado del material que conforma el cerramiento.
El sistema de calefacción se confía a un piso radiante y a una salamandra de alto rendimiento, con doble cámara de combustión lenta ubicada estratégicamente. Esta duplicidad del sistema de calefacción permite calentar la casa de forma rápida usando la salamandra, y sostenerla con el piso radiante, que aprovecha la inercia térmica del único elemento pesado de la construcción. La ubicación de la salamandra junto al diseño de los planos de cubierta facilita que el calor se propague a todos los ambientes de la casa.
Se reduce la paleta de materiales y colores a los negros, blancos y maderas; revestimiento exterior de ciprés pintado negro y modulado en función del espaciado de la chapa acanalada del techo, también negra; paramentos interiores blancos, pisos graníticos negros en planta baja y entarimado también de ciprés en el superior; las carpinterías todas en ciprés natural.
4. Proceso constructivo.
La peculiaridad del sistema constructivo propuesto, acarreó la necesidad del armado de un taller (carpintería) en obra y la capacitación en paralelo de mano de obra local. Este factor, junto al uso de materiales de la zona para evitar el transporte y su gasto energético implícito, tiñó todo el proceso de un intencionado sentido localista. El sistema de armazón permitió también acelerar todo el proceso de obra y limitar al máximo la obra húmeda, reduciendo también el consumo de agua.
La mayoría del residuo de obra, al ser prácticamente madera, fue reutilizado en la misma, o como combustible para calefacción.
Trabajar un programa de viviendas en hilera, analizando las potencialidades que presenta esta tipología en lo referente a la apropiación física del terreno, y a las relaciones formales y espaciales que establecen las distintas unidades entre ellas. Abordar la materialización del proyecto desde el detalle, desde la adaptación de un sistema constructivo propio de otra realidad material. Estudiar su implementación y su pedagogía sobre el terreno para lograr trascender la intención y el dibujo. Considerar los mecanismos pasivos de construcción sustentable inherentes a cualquier construcción de calidad.
[ezcol_1third id=»» class=»» style=»»]
Descripción
Viviendas en hilera
Proyecto y Dirección
Estudio BaBO
Equipo
Francisco Kocourek, Francesc Planas Penadés, Marit Haugen Stabell
Colaboradores
Marcos Buceta
[/ezcol_1third] [ezcol_1third id=»» class=»» style=»»]
Construcción
Arq. Francisco P. Kocourek
Cálculo Estructural e instalaciones
Ing. Julio C. Pacini
Ubicación
Villa la Angostura, Neuquén, Argentina
Superficie del Terreno
1040 m2
[/ezcol_1third] [ezcol_1third_end id=»» class=»» style=»»]
Superficie Construida
310 m2
Año de Proyecto
2009
Año de Construcción
enero 2010 – mayo 2011
Fotografías
Estudio BaBO
[/ezcol_1third_end]