El Valle Trenzado pretende recuperar las huellas del tránsito peatonal anteriores a las obras de encauzamiento que en los años 70 sesgaron definitivamente la continuidad del barranco de Elche. Durante años los ciudadanos de la ciudad atravesaron este lugar sin apenas poder disfrutarlo.
Este accidente geográfico (que alcanza los 40 metros de profundidad) ofrece a la ciudad una oportunidad única de viajar en pocos minutos a un espacio de gran calidad ambiental.
Proponemos un sistema que permite adaptarse a las complejidades geográficas y administrativas que plantea el lugar, para hacerlo más accesible y multiplicar el uso público de las escarpadas laderas.
El sistema demuestra su flexibilidad ajustándose mediante un proceso participativo que reunió durante un mes a ciudadanos y colectivos de la ciudad.Los principales puntos a conectar, las zonas de especial interés, los recorridos más solicitados, una gran colección de usos deseados… fueron incorporadas al proyecto y empezaron a definir el trenzado.
Tras este primer paso, el sistema se volvió a testear abordando las complejas y contradictorias relaciones de los múltiples interlocutores administrativos responsables del lugar: Confederación hidrográfica del Jucar, Consellería de Medio Ambiente, Consellería de Patrimonio, Comunidad de Regantes de la Acequia de Marchena, Aguas de Elche… y Ayuntamiento de Elche.
El sistema pretende finalmente dar voz al rio Vinalopó. Los sinuosos trenzados ya no tienen que ver con la ortogonalidad de la ciudad. Estas serpenteantes líneas moldean las laderas, ofrecen recorridos más cómodos e incorporan el hecho de cruzar el rio a la continuidad del paseo. Los caminos flotantes sobre el hormigonado e intocable cauce se convierten en los héroes de esta reconquista.
El valle ha empezado ya a trenzarse, reduciéndose por ahora a mínimos infraestucturales que permitan con el tiempo el florecimiento de las actividades urbanas.
2 Comments
Con los mayores respetos, muchos de los datos que aquí se dicen no son ciertos, el proceso de participación ciudadana, propuso que la actuación fuese principalmente de preservación medio ambiental, las pasarelas de hormigón no eran necesarias, y las obras que dañaban el entorno natural actual, se sustituia por una parte del proyecto de obras que no podian ser autorizadas por afectaban al lecho y cauce natural del río, por ello la CHJ, Medio ambiente y Patrimonio, no lo autorizaron n, y debieron de modificar el proyecto, por el lago. El resto de la actuación, dentro del casco urbano, es otro sinsentido del proyecto, ya que hablar con el Vinalopó, es respetar el entorno natural y paisajistico, sin añadir elementos tan tremendos, como las pasarelas. Revitalizar las rutas, sendas y parajes del río es el objetivo común, con el que pueden contar con la mayoría de los ciudadanos.